GUERREROS MÍSTICOS

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martes, 6 de junio de 2017

Capitulo 07


GOSAXIPE WUXU
NINJAS









“Juh… ¿No lo sabías? ¡Las chicas debemos ser fuertes para seguir con vida!”
HARUNO SAKURA
NARUTO.

“Los ninjas solo son herramientas, armas, que deben ser utilizadas”
ZABUZA
NARUTO.

“Yo creo que el valor de un hombre puede medirse por cuanto puede dejar su pasado, sea como sea”
CROCODAIN
DRAGÓN QUEST
LAS AVENTURAS DE FLY.





– Vaya, eso fue asombroso – dijo una fatigada y sudorosa Alicia.
– No, para nada, te dije que no eran muy buenos – dijo al tiempo que se secaba con una toalla pequeña y le pasaba otra a Alicia de su mochila.
– Si, pero era la mitad del equipo de futbol y esos movimientos que hiciste, ¡asombroso!
Amira sonrió por los halagos de su amiga – Con razón no ganan nada y en verdad no fue gran cosa, tu también podrías hacerlo, tienes elasticidad, resistencia y energía de sobra, si quieres te puedo enseñar uno que otro movimiento.
– ¿Yo?, no creo que pueda –. Amira miro como su amiga no se valoraba lo suficiente y pensaba << ¿Cómo es que llego a ser capitana de porritas? >> – No, de verdad es muy fácil, si vas a mi casa podemos practicar un poco.
Alicia no podía contener su sonrisa – De acuerdo, pero ahora no puedo, van a venir por mí, mejor mañana.
Amira asintió devolviéndole la sonrisa, volteo a ver a los chicos que estaban sentados en el campo, cansados, confundidos y muy asombrados – ¿Y bien? – les grito – ¿Nuestras pizzas? Los chicos voltearon a verse, se pararon dirigiéndose a sus mochilas, de muy mala gana sacaron dinero y se lo dieron a Pedro, este fue con las chicas y se los entrego – Jugaron de maravilla, sobre todo tu Amira, nunca vi a nadie moverse así – Amira sonrió y se sonrojo un poco – gracias, por eso te voy a dejar que me invites a salir.
– ¿He?... Yo… yo… ¿en serio? – Amira sonrió y asintió – ¿Qué te parece mañana al salir de clases?
– Si… por supuesto – y este volvió con sus amigos con una sonrisa de oreja a oreja.
– Vaya, lo traes de un ala – dijo Alicia.
– ¿Qué quieres que haga?, es un don natural jajaja – las chicas regresaron riendo a la banca, agarraron sus cosas y se dirigieron a la salida  pero antes de salir del campo, alguien las esperaba.
– Bravo, bravo –gritaba a la vez que aplaudía, al estar más cerca les hablo con más calma – eso fue asombroso, y tu corazón, no estuviste tan mal – dijo mirando a Alicia.
– Vaya, que guapo – dijo acercándole la cabeza a Alicia después de observarlo, era un chavo uno o dos años más grande que ellas, de ojos verdes, rubio, con un cuerpo muy marcado por el ejercicio, una sonrisa impecable y una mirada seductora – tienes un novio muy lindo – Alicia se ruborizo y le contesto – No es mi novio, es solo mi hermano.
– ¿De verdad?, ¿y tiene novia?
– Oye… – dijo empujándola con el cuerpo – acabas de hacer una cita con Pedro.
– Si… pero – dijo con un sonrisa – es que no conocía a tu hermano –. Cuando llegaron hasta donde estaba el hermano de Alicia, Amira se adelanto – Hola, soy Amira – y le extendió la mano.
– Jervis Tech – mucho gusto y le beso el dorso de la mano – Amira se puso colorada y Jervis se quedo observándola, después de unos segundos Alicia hablo – vaya, creo que sobro aquí – este gracioso y celoso comentario los saco de su atontamiento.
– He… no para nada, lo siento hermanita, es que tu amiga me cautivo.
– Si, eso se nota – dijo algo enojada Alicia. Amira simplemente seguía mirándolos, estaba sorprendida, era la primera vez que alguien la hacía sentir… ¿atraída?
– Vamos hermanita, no te pongas celosa – dijo con una sonrisa Jervis.
– ¿Celosa? ¿Yo?, para nada – desvió la mirada – por cierto, ¿Qué estás haciendo aquí?
– Ay hermanita, tan despistada como siempre, se te olvido que hoy paso por ti, al ver que no llegabas me preocupe y entre a buscarte, al pasar por aquí te vi jugando y decidí no molestarte al ver que te estabas divirtiendo y por cierto, no lo haces nada mal – Alicia se sonrojo y sonrió, mientras Amira había guardado todas sus cosas y se disponía a irse.
– Bueno, Alicia, Jervis, me retiro, creo que ya se me hizo tarde y me van a regañar.
– Sí, claro – dijo Alicia un poco apenada ya que se había olvidado de ella por un momento – nos vemos mañana.
– Por cierto – intervino Jervis – si quieres te podemos llevar y así no se te hará tan tarde.
– No gracias, me hará bien correr.
– Como quieras – dijo un poco decepcionado Jervis y revisando su bolsa saco un papel y se lo dio – toma, es una invitación para un nuevo torneo de futbol, pueden jugar tanto hombres como mujeres, es mixto y no hay límite de edad, me pareció que te podría interesar.
Amira tomo el papel y se le quedo viendo – Si, me interesa mucho pero no tengo equipo y no conozco a nadie para unirme a uno.
Jervis sonrió y le dijo – no te preocupes, yo estoy haciendo un equipo y al verte jugar me pareció que si te unes tendremos una oportunidad.
Amira guardo el papel y se puso la mochila en la espalda – me lo pensare – y se puso a correr en dirección a la carretera.
– Sabes, creo que tu amiga es un poco rara – dijo desatando la risa de Alicia.

     Amira llevaba la bufanda cubriéndole el rostro, había regresado de la misma forma en la que había llegado, corriendo por el campo y saltando obstáculos, eso la tranquilizaba y le ayudaba a pensar y vaya si tenía cosas que pensar, el día había resultado mejor de lo que había pensado, había hecho una amiga, una buena amiga por lo que podía verse, había jugado futbol y lo habían invitado a un torneo, además estaban Pedro y Jervis, este ultimo la había hecho sentir extraña y eso era precisamente lo que la inquietaba, estaba tan sumida en sus pensamientos que corría casi sin ver, nada mas por puro instinto y reflejos, acababa de pasar el terreno de los perros sin incidente alguno.
– Niña estúpida.
Amira volteo al escuchar esto alcanzando a esquivar por poco un kunai que le fue lanzado pero no fue lo suficientemente rápida ya que le hirió el brazo derecho, de inmediato saco de su mochila, con su brazo izquierdo un par de espadas cortas, agarro una con cada mano y se puso de espaldas contra el tronco de un árbol, tranquilizándose busco la presencia de sus enemigos – uno, dos, tres… siete, son siete – pensó – dos a la izquierda, uno a la derecha, uno atrás y tres más enfrente, bien, allá vamos –.
De la pulsera que llevaba en la mano izquierda se arranco una capsula verde, la apretó entre los dedos y la dejo caer, al contacto con el suelo empezó a desprender un grueso y espeso humo violeta que la cubrió en cuestión de segundos << ninjato fàn >> del espeso humo salieron media docena de espadas cortas en dirección al enemigo, dándole al que estaba detrás de ella << bien, uno menos >> la respuesta de sus enemigos no se hizo esperar y le lanzaron una red de acero pero cuando el humo se quito ya no había nadie << yīn cì kè >> Amira se había colocado atrás de uno de sus enemigos, desde su sombra estiro su brazo y le encajo una espada corta << bien, dos menos >> siguió corriendo y moviéndose entre las sombras, finalmente encontró a otros dos enemigos, salió de las sombras y se paro frente a uno de ellos e hizo un par de movimientos rápidos con las manos terminando dándole un golpe en la frente con la palma derecha << chī xìăng  yōu líng >> el enemigo puso los ojos en blanco y unos segundos después volvió en sí, volteo a ver a su compañero, desenvaino la espada que llevaba en la espalda lo empezó a atacar, su compañero se sorprendió y solo detenía los golpes, aprovechando un momento en que se juntaron mucho, Amira apareció a su lado, estiro los dos brazos, con sus dedos índice y medio toco la parte trasera << jiào qián >> del cuello de los dos combatientes desmayándose en el acto << cuatro menos >> Siguió corriendo dirigiéndose hacia una zona con varios árboles caídos, ramas y troncos, se agacho y se puso de espaldas hacia un montos de estos << zú shuāng >> sintiendo varios movimientos se apresuro a correr pero en un descuido piso una rama y se resbalo, sus oponentes aprovechando se lanzaron hacia ella desenvainando una espada mediana cada una de ellas, se lanzaron y la atravesaron pero Amira apareció detrás de ellas sin blusa y les corto con sus pantorrillas, estaba a punto de recoger su blusa cuando sintió que alguien se le acercaba a una gran velocidad desde su espalda, Amira giro rápidamente y cruzando sus espadas cortas paro el sablazo de su enemigo llevaba una gran velocidad que la hizo deslizar varios centímetros, su enemigo aprovecho que Amira tenía ocupadas sus espadas cortas, con su mano izquierda le lanzo un golpe con la funda pero Amira levanto su pierna derecha y lo paro con la planta pero esto la hizo desequilibrarse un poco lo que su enemigo aprovecho para apoyarse en el choque de espadas. Girando le lanzo una patada con su pierna derecha, Amira lanzo su cuerpo hacia atrás y dio un pequeño salto, lanzo una patada con su pierna izquierda a su enemigo dándole en la espalda, este giro en el aire cayendo de cuclillas, aprovechando el resorteo se impulso a Amira para rematarla en el piso pero esta antes de caer clavo las espadas cortas en el piso y se apoyo para girar en el aire esquivando a su enemigo, aun en el aire doblo las piernas y las agarro con las manos para golpear a su enemigo en la espalda con las rodillas.
     Amira se levanto, volteo a su derecha y después a su izquierda, finalmente sonrió, respiro y se relajo, apenas acababa de dar un paso cuando una sombra la cubrió por encima y antes de que pudiera reaccionar ya se encontraba boca abajo en el piso en forma de X, con los brazos y las piernas estiradas sujetas al piso con aros metálicos en las muñecas y los tobillos
– Niña estúpida – dijo una anciana que estaba parada sobre una de las espadas cortas de Amira – cuantas veces tengo que decirte que nunca bajes la guardia ni siquiera en tu propia casa, si no puedes defenderte de una pobre y débil anciana como yo, ¿Cómo planeas defenderte de enemigos poderosos?
Amira se daba pequeños golpes en la cabeza con el suelo – lo siento abuela, ¿podrías liberarme?
– Lo siento abuela, ¿eso es todo lo que tiene que decirme?, y además ¿qué es eso de andar semidesnuda?
– Es que use el clon y pues… – volteo la cabeza en dirección contraria a su abuela y se ruborizo un poco –…no tenía ropa de repuesto
– ¡Cuantas veces te he dicho que lleves ropa idéntica a la que usas para casos de emergencia!
– Sí, lo siento Zŭmŭ.
– ¡Otra vez!, ya no te disculpes – dijo a la vez que se bajaba de las ninjato y se acercaba al montón de ramas – aunque para no tener tiempo, el clon te quedo bien – dio un pisotón en el piso y seis ninjas mas salieron de los arboles, una de ellas se dirigió hacia Amira para quitarle los aros metálicos mientras la anciana levantaba un tronco mediano con forma humanoide – veo que tus habilidades con las ninjato aumentaron, pudiste cortar en este tronco una silueta en tan poco tiempo y sin que tus enemigos se dieran cuenta, muy impresionante, la verdad.
– No mucho, se ven pequeñas imperfecciones si se ve con atención – dijo Amira.
– Toma – la anciana le aventó el tronco – la líder del clan no debe andar desnuda por ahí.
– Gracias Zǔmǔ – mientras se ponía la ropa, varias ninjas fueron a ver a las heridas – sabes, todavía no entiendo porque me cediste el mando, todavía no te he podido ganar ni una vez.
La anciana dio un respiro y dijo – yo ya estoy vieja y no es bueno que alguien tan viejo dirija, pensamos mucho, hablamos demasiado y actuamos poco, además nos cansamos rápido, jeje.
Al terminar de vestirse, Amira camino con su abuela, recogió su mochila y en eso volteo – ¿cómo estarán ellas? – La anciana también volteo y al ver que se refería a las heridas, respondió – ellas están de maravilla, en nuestro clan no hay mujeres débiles que queden mal por golpes como esos… por cierto, ¿Por qué te contuviste? – Amira se sonrojo y siguió caminando – me di cuenta de quienes eran, reconocí a varias.
– Ya veo… pero no te olvides porque estamos aquí y de quien nos escondemos.
Amira siguió caminando pero se puso seria con la mirada perdida y los ojos llorosos – lo sé abuela, lo sé…

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